En momentos como los de ahora, mientras pasamos más tiempo en casa y el estrés se apodera de nosotros, es muy probable que notemos mucho más los cambios en el comportamiento de nuestros hijos.

¿Has notado fatiga o cansancio en tu hijo de forma innecesaria? Si tu respuesta es sí, lo más probable es que tenga una disminución en el Hierro que solemos darles durante su alimentación. Asimismo, el llevar clases virtuales y se quede dormido frente a la computadora en un horario poco habitual o incluso presente irritabilidad, es momento de ponernos alertas. [1]

Si tu hijo o algún familiar menor de edad presenta: dificultad respiratoria, un ritmo cardíaco más rápido o una hinchazón de manos y pies, dolores de cabeza, mareos o incluso desmayos; es posible que estén sufriendo de anemia. Otros síntomas son la palidez en la piel y labios, mejillas, color rosáceo poco habitual al interior de los párpados. Y frente a esta situación es necesario actuar rápido.[2]

¿Cómo podemos prevenirla? Lo primero es siempre consultar con su pediatra o un médico especialista, pues es probable que su hijo necesite un suplemento nutricional rico en Hierro; y lo siguiente será consultar con un nutricionista o mejorar la calidad alimenticia en casa.

Recordemos que la alimentación genera la energía necesaria para que nuestros hijos rindan mucho más, sobre todo en las actividades diarias y se protejan de enfermedades cada vez más agresivas.

La información contenida en este sitio web no debe usarse como sustituto médico. No reemplace la información aquí señala por la de su médico. Para mayor información, consulte con su médico.

Fuente:

1-Healthychildren.org (2019). La anemia en niños y adolescentes: preguntas frecuentes de los padres.